Registro Central de Titularidades Reales

Hacia una trasparencia empresarial

Entra en vigor el Real Decreto 609/2023, por el que se crea el Registro Central de Titularidades Reales (RCTIR) y se regula su funcionamiento, que quedó paralizado.

En el ámbito empresarial y legal, el concepto de titularidad real ha cobrado una relevancia especial en los últimos años, particularmente en la lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.

La titularidad real se refiere a la persona física que, en última instancia, posee o controla una empresa o sociedad, ya sea directa o indirectamente (cadena de control).

Esta información es crucial para las autoridades que buscan prevenir actividades ilícitas, ya que permite identificar a los beneficiarios últimos de las empresas.

¿Qué es el Registro Central de Titularidades Reales?

El Registro Central de Titularidades Reales es una base de datos creada para recopilar y centralizar la información sobre los titulares reales de todas las empresas y sociedades registradas. Este registro es parte de una estrategia integral a nivel europeo e internacional para aumentar la transparencia financiera y combatir el fraude fiscal, el blanqueo de capitales y otros delitos económicos.

El objetivo principal de este registro es asegurar que las autoridades competentes, como las autoridades fiscales, judiciales y las instituciones financieras, tengan acceso a la información necesaria para identificar a las personas que verdaderamente están detrás de las empresas y sociedades, evitando que éstas sirvan como fachadas para actividades ilegales.

La Importancia de la Titularidad Real en la Prevención del Blanqueo de Capitales

El blanqueo de capitales consiste en disimular el origen ilícito de fondos obtenidos a través de actividades delictivas, integrándolos en el sistema económico-financiero legítimo. Para lograrlo, las personas que operan al margen de la ley, suelen utilizar estructuras empresariales opacas o ficticias, donde es difícil rastrear al verdadero control de los activos.

La identificación de los titulares reales es una herramienta clave para prevenir y detectar el blanqueo de capitales. Con el registro adecuado de esta información, las autoridades pueden rastrear quién se beneficia en última instancia de las actividades empresariales y tomar medidas para sancionar cualquier comportamiento ilícito.

¿Por qué es Necesario para tu Empresa?

Para muchas empresas, el cumplimiento con las obligaciones de transparencia y registro de la titularidad real puede parecer un proceso burocrático adicional. Sin embargo, es fundamental para garantizar la integridad del mercado y proteger tanto a las empresas como al sistema financiero en general de ser utilizados con fines ilícitos.

Además, cumplir con estas normativas es obligatorio para evitar sanciones por incumplimiento y garantizar que tu empresa esté en línea con las regulaciones nacionales e internacionales vigentes. Las sanciones por no cumplir con estas obligaciones pueden ser graves, incluyendo multas y la posibilidad de enfrentarse a procedimientos judiciales.

Funcionamiento del RCTIR

1. Obligación de registro: Las empresas, sociedades y otras entidades jurídicas están obligadas a proporcionar información sobre sus titulares reales a este registro. Esto incluye a las personas físicas que directa o indirectamente posean un porcentaje significativo de las acciones, participaciones o derechos de voto, generalmente más del 25%.
2. Actualización de la información: Las entidades deben mantener actualizada la información de la titularidad real. Si hay cambios en la estructura de propiedad o control, deben ser informados en un plazo breve.
3. Acceso a la información: Aunque el registro es gestionado por las autoridades competentes, una parte de la información es accesible públicamente, promoviendo así la transparencia en la propiedad de las empresas. No obstante, las personas físicas que figuran como titulares reales también tienen ciertos derechos de protección de su información, especialmente cuando existen riesgos de seguridad o privacidad.

Profesionales y actividades implicadas

La normativa de prevención de blanqueo de capitales obliga a una amplia gama de profesionales y actividades a recopilar y remitir la información sobre los titulares reales de las empresas al Registro Central de Titularidades Reales. Entre los principales obligados se encuentran:

1. Entidades financieras: Bancos, cajas de ahorro, entidades de pago y otras instituciones que gestionen fondos de terceros.
2. Asesores fiscales y contables: Aquellos que asistan en la planificación y gestión de operaciones financieras o fiscales.
3. Abogados y notarios: Cuando participen en la creación de empresas, gestión de cuentas, compraventa de inmuebles, entre otras actividades relacionadas.
4. Auditores y expertos contables: Encargados de la verificación de la información financiera de las entidades.
5. Inmobiliarias: En operaciones de compraventa de inmuebles, deben identificar al titular real de las entidades implicadas.
6. Casinos y casas de apuestas: Actividades vinculadas con el juego que gestionan grandes cantidades de dinero.
7. Joyeros y comerciantes de bienes de lujo: Aquellos que realicen transacciones de alto valor, por ejemplo, en oro, joyas, o vehículos de lujo.
8. Prestadores de servicios a sociedades: Aquellos que presten servicios de administración, gestión o creación de empresas y estructuras societarias.

Estos profesionales están obligados no solo a identificar y verificar la titularidad real de las empresas con las que operan, sino también a comunicar esta información al registro y reportar cualquier actividad sospechosa relacionada con el blanqueo de capitales.

Situaciones y canales de colaboración

Los profesionales y entidades obligados a recopilar información sobre la titularidad real de las empresas deben comunicarla al Registro Central de Titularidades Reales de forma electrónica, utilizando los canales habilitados por las autoridades competentes, como el Consejo General del Notariado o el Registro Mercantil. Estos canales permiten acceder y actualizar la información de manera ágil y segura. Pero, ¿cuándo deben utilizarse?:

1. Creación de una nueva entidad: Al constituir una sociedad o empresa, los profesionales (como notarios o asesores) deben identificar y reportar los titulares reales de dicha entidad.
2. Modificaciones en la titularidad: Cuando haya cambios en la estructura de propiedad o control de la empresa (por ejemplo, si una persona adquiere más del 25% del capital o derechos de voto), la información debe ser actualizada en el registro.
3. Realización de operaciones sospechosas: Si los profesionales detectan indicios de blanqueo de capitales o financiación del terrorismo en el curso de sus actividades, están obligados a verificar la titularidad real y, si es necesario, reportar tanto al registro como a las autoridades correspondientes (SEPBLAC en España).
4. Operaciones de alto riesgo: En transacciones financieras o comerciales que involucren un riesgo elevado de blanqueo de capitales, como compraventa de bienes inmuebles, grandes transacciones de joyas o arte, o apertura de cuentas bancarias, es obligatorio identificar al titular real y comunicarlo cuando corresponda.
5. Auditorías e investigaciones: Las entidades financieras y otros sujetos obligados pueden necesitar verificar los titulares reales de una empresa al realizar auditorías internas o colaborar con investigaciones de las autoridades.

Estas comunicaciones son esenciales para mantener actualizada la base de datos del Registro de Titularidades Reales y asegurar el cumplimiento de la normativa contra el blanqueo de capitales.

Normativa esencial

Quinta Directiva contra el Blanqueo de Capitales (Directiva UE 2018/843), que establece la necesidad de disponer de registros centralizados y accesibles de titulares reales en cada país miembro. Además, esta normativa se refuerza a través de otras directivas y leyes. Aunque ya de menor calado. A nivel interno, contamos con la Ley 10/2010 de prevención del blanqueo de capitales y de la financiación del terrorismo.

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